Un momento de reflexión

La  gente viaja para maravillarse
ante las cumbres de las montañas,
ante las olas enormes de los mares,
ante los grandes cauces de los ríos,
ante la vasta extensión del océano,
ante el movimiento circular de los astros,
y pasan ante ellos mismos sin maravillarse.
                                   
                                  SAN AGUSTÍN

Patrón del chocolate Godiva

En más ocasiones de las que nos gustaría nos encontramos desmotivados para hacer lo que queremos o debemos hacer. Richard Bandler nos ofrece un ejercicio efectivo para ponernos en marcha, se llama“Patrón del chocolate Godiva”.

1. Piensa en algo que haces y que realmente deseas, algo por lo que sientes interés, y/o algo que te sientes totalmente obligado a hacer si pudieras realizarlo ahora mismo. Para ello puedes utilizar un recuerdo o, si lo prefieres, puedes imaginar algo que en realidad no has hecho aún, pero que harías con entusiasmo. Recuerda que lo estás viviendo mentalmente, por lo que siéntete libre y deja que tu imaginación vuele libremente. Asegúrate que la imagen que has elegido te estimula realmente e imagina con todo lujo de detalles lo que verás, oirás, sentirás, tocarás, cuando lo estés haciendo. Asegúrate de que las sensaciones son emocionales además de físicas y observa qué palabras te oyes decir a ti misma interiormente, así como los sonidos de tu alrededor. Asegúrate de que la imagen es grande, brillante y nítida. Mira esta imagen a través de tus propios ojos. A esta imagen la llamaremos Cuadro 1.
2. Haz un pequeño descanso y fíjate en algo de tu alrededor.
3. Ahora piensa en lo que tienes que hacer y con lo que ahora no estás muy entusiasmada. Cambia la imagen si es necesario, como si te contemplaras a ti misma haciendo algo, como espectadora. A esta imagen la llamaremos Cuadro 2.
4. Comprueba en tu interior que esto es lo que realmente quieres.
5. Ahora imagina que el Cuadro 2 (la actividad menos deseada) está detrás del Cuadro 1.
6. Imagina que hay una conexión entre las dos imágenes. Mientras lo haces, abre un pequeño agujero en el centro del Cuadro 2 para que puedas ver el Cuadro 1 a través del agujero.
7. Ahora, muy deprisa, deja que las sensaciones e imágenes del Cuadro 1 rompan el agujero del Cuadro 2 para que el Cuadro 1 cubra rápidamente el Cuadro 2 y puedas experimentar todo el entusiasmo y el deseo del Cuadro 1.
8. Ahora guarda todas las emociones positivas y cierra el agujero tan rápido como te sea posible.
9. Repite el proceso tantas veces como necesites y así experimentarás el sentimiento o el deseo irresistible que está totalmente asociado a la actividad que quieres hacer.

Neuronas espejo

Daniel Goleman en su libro Inteligencia social, opina que todos estamos conectados, que recogemos las emociones internas de los demás. Esto es particularmente cierto en las relaciones de poder, como pueden ser la de profesor-alumno,  posiblemente porque prestamos más atención a alguien con autoridad. Por lo que deducimos que los alumnos pueden fácilmente sintonizar con tu estado emocional interno: saber si tienes miedo, si estás seguro de ti mismo.

Todos estamos conectados a través de las neuronas espejo. Se cree que el cerebro humano tiene múltiples sistemas de neuronas espejo que nos capacitan no solo para entender las acciones de los demás, sino tabién sus intenciones, emociones y el significado social de sus  conductas. Dichas neuronas espejo se activan cuando realizamos una acción y cuando observamos la misma acción en los demás. Al hacer esto, las neuronas reflejan literalmente la conducta de la otra persona. Dentro del cerebro humano, se ha visto que la actividad del córtex premotor y del córtex parietal inferior está relacionada con la actividadd de estas neuronas, que se desarrollan en el primer año de vida y ayuda  a los niños a entender las acciones de las personas. Se cree que están especialmente implicadas en la percepción y en la comprensión de las acciones motrices, así como en el procesamiento cognitivo de orden superior: la imitación, el lenguaje, la empatía.

Feliz Navidad

Un ejercicio interesante, que seguro todos hacemos, es visionarnos hace un año (hacerlo con el mayor detalle posible, tanto en lo exterior como en lo interior) para cerciorarnos de si se han complido nuestros objetivos. Curiosamente, mientras hacía el ejercicio, ha llegado a mí este cuento que comparto con vosotros para que os ayude a reflexionar, deseandoos que encontréis la paz anhelada.

Había una tribu africana que ayudaba a los exploradores y les hacían de guías por la selva, cuando las caminatas se hacían muy deprisa, los indígenas invariablemente de donde estuvieran, y sin avisar, se sentaban a esperar.
Cuando los exploradores les preguntaron, estos les dijeron que cuando andaban muy deprisa sus almas quedaban atrás, y debían esperar para recuperarlas. 

La vida va muy deprisa y la mayoría no hicimos todo lo que nos propusimos.

El mejor remedio es parar, recuperar tu alma, confiando que las cosas se colocarán.  



Los siete hábitos de la gente altamente efectiva

Primer hábito: Ser proactivo.

La proactividad se refiere a que ante cada estímulo podemos decidir la respuesta. No somos esclavos de las acciones que sobre nosotros se efectúan, sino libres ejecutores de nuestra conducta.

Segundo hábito: Empiece con un fin en mente.

Nuestra conducta no debe ser regida por el capricho o el azar, sino que debemos tener unos objetivos precisos. Cada vez que tomamos una decisión debemos tener en cuenta si ésta nos aleja o acerca de nuestro objetivo.

Tercer hábito: Establezca primero lo primero.

Esta frase de Goethe lo expresa con total claridad: “Lo que importa más nunca debe estar a merced de lo que importa menos”. Consiste en establecer prioridades.

Cuarto hábito: Pensar en Ganar-Ganar.

Nuestras interacciones con otros seres humanos siempre deben ser de mutuo beneficio. No existe otra opción, aunque a corto plazo parezca que obtienes la ganancia inmediata, a largo plazo no es así. (Si yo gano y mi cliente pierde, pierdo al cliente).

Quinto hábito: Procure primero comprender y después ser comprendido.

Mira desde la perspectiva del otro. Ten empatía. Hablamos más que escuchamos y pensamos que las cosas sólo pueden ser como nosotros creemos.

Sexto hábito: La sinergia.

Algunos objetivos podremos conseguirlos solos, pero en multitud de ocasiones necesitaremos el trabajo en equipo.

Séptimo hábito: Afile la sierra.

Si un leñador se haya tan inmerso en su trabajo que sólo se dedica a talar árboles y no para afilar el hacha, al final, perderá tiempo y esfuerzo. Es decir, dedica tiempo a mejorar tus condiciones mentales y físicas mediante el ejercicio físico y el estudio.

Llevo muchos años aprendiendo a decir “no”. “No” a los chantajes emocionales de la familia (los más difíciles de sortear), de los amigos, de los alumnos, del jefe, y aún no lo he conseguido. Como muchas personas, tengo claro lo que quiero: un buen compañero, hijos, una buena casa, un buen trabajo, un buen sueldo. Y tengo todavía más claro lo que “no quiero”.

Es curioso que en multitud de ocasiones, cuando nos preguntan nuestros deseos los definimos desde la negación: no quiero que te aproveches de mí, no quiero que me faltes al respeto, no quiero que me hables así, no quiero que siempre llegues tarde. En PNL se dice que la mente no registra el “no”, por lo tanto, cuando le decimos a nuestra pareja que “no quiero que me hables así” en realidad le estamos diciendo que sí queremos, cuando decimos a nuestros alumnos que no queremos que hablen tanto, ellos perciben que sí. Para ser más efectivos, los mensajes se podrían sustituir por: respétame y cállate. Sin embargo, muchas veces los emitimos desde la negación como si ni nosotros mismos nos lo creyésemos.

No dejamos de ser un feto

¡El embrión y la madre se comunican física y emocionalmente desde el primer día de vida! Sí. Todos sabemos que la alimentación de la madre durante los nueve meses, el estrés… condicionan al bebé. Hay embarazadas que escuchan música clásica, de alcohol ni una gota, sólo agua embotellada, hay quien desanconseja teñirse el pelo, la cafeína reduce la absorción de hierro de la madre y puede generar anemia, los baños calientes pueden incrementar el riesgo al  de aborto.Y es que la madre y el embrión se comunican desde el primer día de vida. Es maravilloso. Éste envía señales  a las trompas y éstas le responden indicando el recorrido que debe seguir hasta llegar al lugar donde debe anidar (ya en los días 6 y 7). Además le proporciona la vitalidad que necesita para vivir ya que durante los cinco primeros días sólo dispone de la energía del óvulo. En el día 15 se desarrolla en sistema circulatorio del embrión gracias al flujo de sangre que toma de la placenta materna. Y en el día 21 se produce el primer latido. Maravilloso.

Los científicos han demostrado que la salud y el carácter de una persona dependen de cómo discurre su vida en el útero materno, más que de la herencia genética, la educación o la experiencia. Tendencia al sobrepeso, al asma, a la ansiedad, la diabetes, infartos, cáncer. Al respecto añadiré un dato que me deja perpleja: la contaminación atmosférica, ésa a la que estamos expuestas en las grandes ciudades, influye en el parto prematuro, el bajo peso al nacer y las malformaciones del corazón, entre otras enfermedades.

Me pregunto si el posible que existan mujeres que durante nueves meses sean siempre felices, se alimenten tan bien, eviten la contaminación, la comida basura, el agobio del trabajo, todos esos hábitos que adquirimos en la vida normal y abandonarlos sin estrés. Habrá que practicar antes de quedarse embarazadas, sería ideal adquirirlos para siempre.

Sin embargo, la Universidad de Oregón está realizando un estudio dirigido por el Dr. David Williams, que demuestra que si la madre toma durante el embarazo ciertas sustancias, el feto se inmuniza contra la enfermedad para toda la vida. Mediante un suplemento alimenticio a embarazadas diremos por fin adiós al cáncer. Ojalá así sea.